La producción de lana es una antigua tradición de el Casentinese, importados por los romanos. Tejer, practicado en la antigüedad con el marco se ha convertido en un símbolo de la artesanía toscana combinado con la calidad de una materia preciosa: paño Casentino.
Inicialmente a Stia se trabajaba un tejido impuro y firme, para la venta en dos grandes ciudades como Prato y Firenze.
Ahora se dieron cuenta de que la resistencia al desgaste del material estaba ideal para ropa particular y para esto lo monjes y pastores de la Toscana lo utilizaron durante mucho tiempo.
Largo de los siglos han sido extensas técnicas manuales, hasta los "pannaioli", trabajadores especializados por la lavoraciòn de este precioso material, mejoraron su calidad. A partir de ahora a Stia, de carcasa simple, empezaron a hablar de un arte, con el fin de crear una marca que ha distinguido la tela de los otros presentes en la ciudad.
En la edad media, muchas tiendas especializaron en el tratamiento de un material de calidad y en el refinamiento de su laboraciòn, y a partir de ahì se popularon las arcadas de el Borgo Maestro, un símbolo de la artesanía hecha en Toscana donde los valores se han transmitido hasta nuestros días con una empresa única.
Tessilnova en el corazón de Stia es el intérprete de esta historia antigua, el arte y la cultura de un territorio. Aquí, donde se originó el famoso Panno Casentino estàn algunos de los laboratorios de la empresa.
El arte de tejer por Claudio Grisolini, primer diseñador de paño fino o Panno Casentino, es el ejemplo perfecto de la artesanía de este tejido de lana pura, suave y mullida. Sus técnicas y conocimientos ancestrales relacionados con este material se combina con las últimas tecnologías para dar vida a un saber apreciado y conocido en todo el mundo.